Pasa que al despertar tuve ganas de escribir. Y cómo me gustaría que en vez de esto que voy diciendo fuera una novela con personajes y todo. Llevar una agenda, tomar notas como Trigorine en La Moullete, perfectamente vestida, manos mías más pálidas posadas sobre cuartillas, escribiendo con una pluma de cisne. Seria, serena, diciendo qué interesante, pronunciando conferencias, interpretando históricamente, sociológicamente, antropológicamente, políticamente, lo que pasa afuera: los eventos consuetudinarios que acontecen en la rúa. Serena, leyendo los diarios todos los días, salvada, tal vez casada con un señor serio y sereno, el amor dos o tres veces por semana, hasta Hegel, ¿y por qué no leería a Hegel?, suena el timbre, la señora está trabajando, no está visible (ningún hombre es visible), hubiera querido ser Rimbaud o Baudelaire pero sin sus sufrimientos, qué vivo. Por la tarde, música –a veces dodecafónica (expresión contemporánea: qué interesante)- o pintura, hasta Vassarely, hasta Mondrian, qué interesantes, hasta la política, leer los diarios dándose cuenta de lo que insinúan entre líneas –no sólo las historietas y las páginas literarias como ahora sino responsablemente, serenamente-. Por la noche: comida en casa del escritor X o de la escritora Z. Copa de armagnac en mano pálida y enjoyada hablo de los suplicios chinos, fumo prudentemente, consulto mi reloj, me levanto a las 23.30 porque –buenas noches, encantadora la velada- en la medianoche ya debo estar en la cama de manera de levantarme al otro día serena y despejada a las 7.30 y trabajar hasta el mediodía, comida sana, vitaminizada, sobriedad, no alcohol, no excitantes, no gracias, no mescalina, no haschich, no ácido lisérgico (naturalmente, he leído todos los libros sobre el tema: qué interesantes). En el verano al borde del mar –Capri, Saint Tropez, Santander, San Sebastián, Punta del Este, Mar del Plata, Córcega….- sin escribir nada puesto que reconstitución, reconstrucción, reacumulación, sol, mar, arenas, no, no gracias, pero sin sus sufrimientos, sin haber sufrido lo que sufrieron.
martes, 19 de agosto de 2008
DE EL ESCORIAL
Pasa que al despertar tuve ganas de escribir. Y cómo me gustaría que en vez de esto que voy diciendo fuera una novela con personajes y todo. Llevar una agenda, tomar notas como Trigorine en La Moullete, perfectamente vestida, manos mías más pálidas posadas sobre cuartillas, escribiendo con una pluma de cisne. Seria, serena, diciendo qué interesante, pronunciando conferencias, interpretando históricamente, sociológicamente, antropológicamente, políticamente, lo que pasa afuera: los eventos consuetudinarios que acontecen en la rúa. Serena, leyendo los diarios todos los días, salvada, tal vez casada con un señor serio y sereno, el amor dos o tres veces por semana, hasta Hegel, ¿y por qué no leería a Hegel?, suena el timbre, la señora está trabajando, no está visible (ningún hombre es visible), hubiera querido ser Rimbaud o Baudelaire pero sin sus sufrimientos, qué vivo. Por la tarde, música –a veces dodecafónica (expresión contemporánea: qué interesante)- o pintura, hasta Vassarely, hasta Mondrian, qué interesantes, hasta la política, leer los diarios dándose cuenta de lo que insinúan entre líneas –no sólo las historietas y las páginas literarias como ahora sino responsablemente, serenamente-. Por la noche: comida en casa del escritor X o de la escritora Z. Copa de armagnac en mano pálida y enjoyada hablo de los suplicios chinos, fumo prudentemente, consulto mi reloj, me levanto a las 23.30 porque –buenas noches, encantadora la velada- en la medianoche ya debo estar en la cama de manera de levantarme al otro día serena y despejada a las 7.30 y trabajar hasta el mediodía, comida sana, vitaminizada, sobriedad, no alcohol, no excitantes, no gracias, no mescalina, no haschich, no ácido lisérgico (naturalmente, he leído todos los libros sobre el tema: qué interesantes). En el verano al borde del mar –Capri, Saint Tropez, Santander, San Sebastián, Punta del Este, Mar del Plata, Córcega….- sin escribir nada puesto que reconstitución, reconstrucción, reacumulación, sol, mar, arenas, no, no gracias, pero sin sus sufrimientos, sin haber sufrido lo que sufrieron.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Decidí crear este blog porque estoy convencida que el conocimiento si no se comparte es inútil. He dedicado más de 15 años al estudio de su vida y obra. Realicé mi tesis doctoral sobre el discurso autobiográfico en AP, la cual resultó un libro de 700 páginas (se puede consultar en la Biblioteca de la Universidad Complutense de Madrid). Ahora bien, solo os pido una cosa. Por respeto a mi dedicación y estudio, si tomáis fotos, artículos u otro material, citad la fuente. Muchas gracias.
Datos personales
- PATRICIA VENTI
- Poeta y doctora en Literatura Latinoamericana por la Universidad Complutense de Madrid. Estudió los archivos de Alejandra Pizarnik depositados en la Universidad de Princeton.
Mi pagina personal
Arte y Ensayo
Etiquetas
- ARTICULO (1)
- articulo cristina piña (1)
- articulo de Adriana Bernal (1)
- articulo de Alicia Amelia Villarreal Brictson (1)
- articulo de Ana Nuño (1)
- Artículo de Cristian Basso Benelli (1)
- Articulo de Elizabeth Delgado (1)
- Articulo de Estanislao Giménez Corte (1)
- Artículo de Eve Gil (1)
- articulo de Gabriela Yocco (1)
- artículo de José Antonio Maya González (1)
- articulo de Jose Manuel Sanchez Paulete (1)
- Articulo de Juan Capetillo Hernández (1)
- articulo de Marcia Martínez (1)
- articulo de Marcos Vieytes (1)
- Articulo de Mariana Di Ció (1)
- articulo de Mercedes Alfon (1)
- Artículo de Mercedes Roffe (1)
- artículo de Paulo González Cárdenas (1)
- articulo de Rebecca Behar (1)
- articulo patricia venti (6)
- bibliografia de y sobre Pizarnik (2)
- biografia (2)
- Capítulo extraído del libro "La escritura invisible" de Patricia Venti (1)
- Censura (4)
- correspondencia (2)
- critica "La escritura invisible" (2)
- Cuadernos de notas (1)
- Diario (1)
- diatriba (1)
- Ensayo de Rodolfo Alonso (1)
- entrada diario (3)
- entrevista (1)
- libros propios (2)
- MADRID 2008 (1)
- MARA VITAS HABLA SOBRE PIZARNIK (1)
- Obra de teatro (2)
- pensamiento (1)
- poema pizarnik en francés (1)
- POEMAS (3)
- POEMAS DISPERSOS (2)
- presentacion libro (1)
- prosa pizarnik (1)
- Reseña de Arturo García Ramos (1)
- Reseña de Patricio Lennard (1)
- Tagebücher (1)
- TESTIMONIOS (2)
- TEXTOS DISPERSOS (1)
Archivo del blog
-
▼
2008
(40)
- ► septiembre (8)
2 comentarios:
Te imagino mucho más apasionada, por algo le has dedicado tanto al estudio de Alejandra Pizarnik; la descubrí hace unos años y dejo una huella profunda en mi y en reconocimiento recientemente le robe el nombre de mi blog: "el deseo de la palabra" y buscandola en estos mundos, nuevos para mi, de la globosfera te encontré y quería agradecerte que compartas con nosotr@s tanto trabajo. Gracias Patricia. Saludos.
Me equivoque de mundo: blogosfera, todavía no me aprendí la nueva terminología.
Publicar un comentario